GRUPO EXCURSIONISTA DE PEÑALARA EN LA SERRANÍA DE CUENCA Y RECORRIDO POR LA CAPITAL.
11 Y 12 DE NOVIEMBRE DE 2023.
En esta ocasión, nuestro compañero Javier Ruiz de Assin nos preparó y guió en dos preciosas rutas en la provincia de Cuenca. La primera consistió en un recorrido por la Serranía de Cuenca y la segunda una bonita ruta por los alrededores de su capital.
El prólogo consistió en una toma de contacto, el viernes por la noche, con el interesante patrimonio cultural de esta ciudad (morteruelo, vino de La Mancha…). Bromas aparte, un paseo nocturno por la Hoz del Huécar es algo que no se puede perder quien visite Cuenca. Una acertada iluminación envuelve el conjunto de precipicios, casas colgadas y monumentos creando un entorno espectacular.
El sábado nos trasladamos al pueblo de Huerta del Marquesado para realizar la denominada “Marcha Blume” en homenaje al gimnasta Joaquín Blume, que falleció en accidente aéreo en la zona el 29 de abril de 1959.
Se comienza siguiendo el arroyo de la Hoz entre endrinos, chopos, sauces y nogales, revestidos con los bonitos colores del otoño. Ya en las zonas superiores del barranco de la Hoz y en los lugares llamados Roble Gordo y Goteral de la Erilla aparecen encinas, sabinas, acebos y pinos.
Tras un fatigoso pero corto ascenso llegamos a la cruz conmemorativa del fatal accidente de aviación, en cuya base están esculpidos los nombres de los pasajeros y tripulantes fallecidos. Con un último esfuerzo coronamos la cumbre del Collado Bajo (1840 m.). Desde allí ya todo fue bajada cómoda, salvo algún inoportuno resbalón…
La fina lluvia que nos acompañó este día no nos impidió disfrutar de esta hermosa ruta.
De regreso visitamos la bonita población de Cañete, con sus murallas y puertas, el recorrido por el arroyo de las Fuentes y la cascada del Pozo de la Horca, y los simpáticos conjuntos escultóricos costumbristas repartidos por la localidad.
Para el domingo, Javier nos tenía preparado un recorrido que nos dejara un buen recuerdo de la ciudad de Cuenca, ¡y vaya si lo consiguió!
Remontamos las orillas del río Júcar, con exuberante arboleda de colores amarillos y ocres. Subimos a la ermita de San Julián el Tranquilo, donde, haciendo honor a su nombre, pasamos en silencio, pues estaban en misa. Las paredes rocosas de
esta zona albergan multitud de vías de escalada. Nos detuvimos en varios miradores para admirar esta preciosa ciudad y su entorno. La ruta podría muy bien haberse titulado “Mirando pa Cuenca”.
Tras cruzar la Hoz del Huécar, algunos por una inquietante tirolina, la más larga de Europa según los conquenses, ascendimos hasta el monumento al Sagrado Corazón de Jesús. Allí repusimos fuerzas y echamos un último vistazo aéreo a la ciudad, antes de descender para dar por terminada la caminata.
¡Muchas gracias, Javier, por este estupendo fin de semana conquense!
Texto de Enrique Melcón.
Fotos de los asistentes a la ruta.
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